La Fundación Renal Española presenta Salud Laboral – Salud Renal, un programa pionero dirigido a empresas para promover la salud renal entre sus trabajadores. Su objetivo general es el de sensibilizar y concienciar a empleados y directivos sobre la importancia de la enfermedad renal crónica, fomentando  la detección precoz y hábitos saludables en el entorno laboral. En España, se estima que uno de cada siete adultos padece ERC (aproximadamente un 15% de la población), pero muchos de los afectados lo desconocen, debido a que en fases iniciales la enfermedad no presenta síntomas claros. Esta falta de visibilidad convierte a la ERC en una “enfermedad silenciosa” que suele descubrirse en etapas avanzadas, cuando los riñones ya han perdido buena parte de su capacidad. Ante esta realidad, el programa Salud Laboral – Salud Renal busca informar y educar a los trabajadores para cuidar sus riñones, prevenir la aparición de la enfermedad o frenar su avance, y mejorar así su calidad de vida dentro y fuera del trabajo. En definitiva, se trata de incorporar la salud renal a la cultura preventiva de la empresa, del mismo modo que ya se hace con la seguridad laboral u otras iniciativas de bienestar corporativo.

Nos adaptamos a las necesidades de cada empresa

Cada empresa tiene características únicas, por ello el programa Salud Laboral – Salud Renal se adapta a las necesidades y tamaño de cada organización. La Fundación Renal Española trabaja conjuntamente con el área de prevención de riesgos laborales de las empresas para diseñar un plan a medida. Las acciones pueden incluir desde charlas formativas hasta actividades prácticas, en distintos formatos y combinaciones:

Charlas informativas (presenciales u online): Conferencias participativas impartidas por prefesionales de la nefrología y enfermería nefrológica, donde se explica qué es la ERC, cómo prevenirla y detectarla a tiempo. Estas sesiones permiten resolver dudas de los empleados de forma directa.

Pruebas de detección precoz: Jornadas de cribado en el centro de trabajo, en las que se lleva a cabo unas sencillas pruebas para valorar la función renal de los empleados. Son pruebas muy sencillas: un pinchazo en el dedo para medir creatinina y glucosa, o la toma de la presión arterial, y los resultados se obtienen al momento . Tras las pruebas, se entrega un breve informe a los participantes y se deriva a su médico de empresa o de cabecera a aquellos que presenten valores alterados.

Actividades de team building centradas en la salud renal: Dinámicas de grupo saludables que refuerzan el mensaje de cuidado de los riñones. Por ejemplo, se organizan caminatas y rutas saludables, o competiciones lúdicas relacionadas con conocimientos de salud. Estas actividades fomentan la participación activa de los empleados y la integración de los mensajes preventivos de una forma amena y motivadora.

Gracias a esta flexibilidad de formatos, el programa puede implantarse tanto en oficinas corporativas como en entornos industriales, abarcando desde pequeñas charlas hasta eventos de bienestar de mayor escala. El contenido y la duración se ajustan en función del tiempo disponible y los intereses de la plantilla, garantizando siempre que el mensaje clave llegue de forma efectiva: cuidar la salud renal es posible y es responsabilidad de todos, también en el ámbito laboral.

Contenidos: factores de riesgo y claves para la prevención

El programa Salud Laboral – Salud Renal aborda una variedad de contenidos educativos fundamentales para entender la enfermedad renal crónica y cómo prevenirla. Entre los temas que se tratan en las charlas y actividades, destacan:

Principales factores de riesgo: Se presentan cuáles son las condiciones y hábitos que aumentan la probabilidad de padecer enfermedad renal. Entre ellos figuran la hipertensión arterial, la diabetes, la obesidad y el sedentarismo, además de hábitos tóxicos como el tabaquismo o el consumo excesivo de alcohol. También se mencionan factores como la edad (mayores de 60-65 años) o los antecedentes familiares de enfermedad renal. Conocer estos factores de riesgo permite a los trabajadores identificar si tienen alguna condición que requiera mayor vigilancia de su salud renal.

Decálogo de prevención: Como herramienta práctica, el programa difunde un decálogo con diez recomendaciones clave para mantener unos riñones sanos. Estos 10 pasos para cuidar tus riñones resumen hábitos saludables e incluyen consejos como llevar una dieta equilibrada y baja en sal, realizar actividad física regular, controlar la presión arterial y el azúcar en sangre, evitar el tabaco, moderar el consumo de alcohol y mantener un peso adecuado, entre otros. Asimismo, se insiste en la importancia de realizar chequeos médicos periódicos, especialmente en personas con hipertensión o diabetes, para detectar a tiempo cualquier indicio de deterioro renal. Este decálogo preventivo se facilita a los participantes en forma de material divulgativo para que lo apliquen en su día a día.

Nutrición e hidratación adecuadas: Una parte esencial de la prevención es la alimentación. En el programa se explica cómo una nutrición equilibrada protege la salud renal. Se aconseja reducir la ingesta de sal para ayudar a controlar la tensión arterial y evitar sobrecargar al riñón, así como limitar los alimentos ultraprocesados ricos en aditivos perjudiciales. Por el contrario, se promueve una dieta rica en verduras, frutas, proteínas saludables y baja en azúcares. Igualmente, se recalca la importancia de la hidratación: beber alrededor de 1.5 a 2 litros de agua al día contribuye a un funcionamiento óptimo de los riñones y favorece la eliminación de toxinas a través de la orina . Un buen estado de hidratación en la jornada laboral (por ejemplo, tener acceso a agua e incorporar pausas para beber) puede marcar la diferencia.

Ejercicio físico seguro: El programa anima a combatir el sedentarismo incorporando actividad física en la rutina de los empleados (por ejemplo, subir escaleras, estiramientos en la oficina, o deporte después del trabajo). Se explican los beneficios del ejercicio regular, ya que ayuda a controlar la presión arterial y el peso corporal, dos factores básicos para prevenir la ERC. Asimismo, se hace hincapié en practicar ejercicio de forma segura y acorde a la condición física de cada uno, evitando situaciones extremas de deshidratación o sobreesfuerzo sin supervisión. Un estilo de vida activo, pero equilibrado, es uno de los pilares del cuidado renal.

Riesgos del consumo excesivo de proteínas y suplementos: Un apartado importante se dedica a alertar sobre el abuso de dietas hiperproteicas y suplementos nutricionales sin control médico, una práctica que ha ganado popularidad en entornos laborales competitivos y entre personas que realizan deporte por su cuenta. Los expertos de la Fundación explican que un exceso de proteínas en la dieta puede suponer una sobrecarga para los riñones, obligándolos a un esfuerzo de filtración extra para eliminar los residuos del metabolismo proteico. Por ello, se aconseja moderar la ingesta de batidos proteicos u otros suplementos deportivos y, en caso de tomarlos, realizar un chequeo renal previo y un seguimiento periódico y adaptarlos a la condición física y al nivel de ejercicio de cada uno. De igual forma, se advierte sobre la automedicación con fármacos potencialmente nefrotóxicos (por ejemplo, antiinflamatorios como el ibuprofeno tomados de forma crónica sin supervisión). El mensaje es claro: tanto la nutrición deportiva como cualquier medicamento deben usarse de forma responsable y siempre siguiendo las recomendaciones de los profesionales sanitarios.

A través de estos contenidos, Salud Laboral – Salud Renal proporciona a los trabajadores conocimientos prácticos para cuidar de sus riñones. Las sesiones se diseñan con un lenguaje profesional pero comprensible, evitando tecnicismos innecesarios y apoyándose en material audiovisual, ejemplos reales y datos relevantes. De esta manera, se logra captar la atención del público general y desmitificar la idea de que los problemas renales solo les ocurren a otros o solo aparecen en edades muy avanzadas. Cada participante sale del programa sabiendo identificar señales de alerta, consciente de la relevancia de sus hábitos diarios en la salud renal, y motivado para adoptar pequeños cambios positivos que pueden tener un gran impacto preventivo.

Revisiones médicas anuales y fomento de la cultura preventiva

Un aspecto que refuerza este programa es la importancia de integrar la salud renal dentro de los protocolos de salud laboral existentes en la empresa. En concreto, se insta a las organizaciones a incluir la evaluación de la función renal en las revisiones médicas anuales que se realizan a los empleados. Añadir pruebas sencillas como un análisis de sangre con creatinina sérica para estimar el filtrado glomerular, y un análisis de orina para detectar albúmina o proteína, puede marcar la diferencia a la hora de detectar precozmente la enfermedad. Incorporando estos controles en el reconocimiento médico laboral, la empresa contribuye a que sus trabajadores descubran a tiempo posibles problemas renales antes de que aparezcan síntomas y puedan derivar en daños irreversibles.

Además de las pruebas médicas, el programa Salud Laboral – Salud Renal promueve una cultura preventiva continua en la organización. Crear una cultura preventiva significa que directivos y empleados valoren la salud (incluida la renal) como un activo fundamental: una plantilla sana es más productiva, tiene menos ausencias y trabaja con mayor bienestar. La empresa, por su parte, se beneficia de reducir riesgos laborales asociados a problemas de salud crónicos y demuestra su compromiso con el bienestar de su equipo humano.

Ejemplos de actividades ya realizadas por la Fundación Renal Española

El programa Salud Laboral – Salud Renal ya se ha puesto en marcha con éxito en diversas organizaciones y entornos laborales de España, lo que sirve de ejemplo inspirador para nuevas empresas interesadas. Algunas actividades reales realizadas por la Fundación Renal Española en colaboración con empresas son:

Sendero saludable No hipoteques tus riñones con Banco Santander: Jornada de ejercicio al aire libre organizada para los empleados de Banco Santander, combinando una marcha solidaria y un recorrido por un circuito saludable. Durante la actividad, los participantes realizaron una caminata en equipo y, a lo largo del trayecto, fueron pasando por puestos donde se les planteaban pruebas de conocimiento sobre salud renal, aprendiendo de forma lúdica sobre los factores de riesgo y cómo cuidarse. La jornada concluyó con la entrega de premios a los ganadores del reto, fomentando la motivación y el compañerismo. Esta iniciativa de team building saludable logró recaudar fondos para proyectos de la Fundación y, sobre todo, concienciar a cientos de trabajadores sobre la importancia de prevenir la ERC de forma participativa. Más información de esta actividad en este enlace.

Pruebas de detección precoz en Mutua Madrileña: Como parte de la semana de la salud para empleados de la Mutua Madrileña, la Fundación instaló en sus oficinas un stand de salud renal donde se ofrecieron pruebas de cribado a los trabajadores de la compañía. Decenas de empleados se realizaron mediciones de tensión, análisis de gota de sangre, obteniendo en minutos información sobre su función renal. A quienes presentaron factores de riesgo se les dio consejos personalizados y se les recomendó seguimiento médico. La actividad tuvo una excelente acogida, con gran participación y consultas, logrando visibilizar la ERC entre personal de diferentes departamentos de la Mutua. Muchos comentaron que desconocían su presión arterial o nivel de creatinina antes de la prueba, y valoraron positivamente la oportunidad de saber cómo estaban sus riñones. Esta colaboración ejemplifica cómo la empresa y la Fundación pueden aliarse para proteger la salud de los empleados, integrando la prevención en la rutina laboral.

Charlas formativas: El programa también ha llegado a compañías de distintos sectores mediante sesiones educativas adaptadas. Por ejemplo, se han impartido charlas presenciales en la sedes de Acciona y Repsol, así como una webinar interactiva para los empleados de Cruz Roja Española. En todas ellas, expertos de la Fundación ofrecieron información clara y consejos prácticos sobre salud renal, seguidos de rondas de preguntas donde los trabajadores pudieron resolver sus inquietudes. Estas charlas, ya sea en un auditorio de empresa o vía telemática, han logrado generar debate y reflexión entre los equipos humanos, poniendo el tema de la enfermedad renal sobre la mesa. El impacto de estas formaciones se percibe en una mayor conciencia colectiva: los empleados comparten la información con sus familias, se apoyan entre colegas para seguir hábitos saludables  y, en general, la empresa avanza hacia un entorno más saludable y prevenido.

Salud Laboral – Salud Renal se consolida así como un programa versátil y de alto valor añadido para las empresas, con resultados tangibles en la mejora del conocimiento y las actitudes de los trabajadores frente a la enfermedad renal. Cada colaboración establecida demuestra que, con las estrategias adecuadas, es posible acercar la prevención de la ERC al día a día de las personas en su lugar de trabajo. La Fundación Renal Española continúa ampliando este programa a más entornos laborales, convencida de que invertir en la salud renal de los empleados redunda en un beneficio mutuo: ganan las personas, que disfrutan de una mejor salud y calidad de vida, y ganan las empresas, que cuentan con trabajadores más sanos, informados y comprometidos. Como dice el lema de nuestra plataforma: Siempre se puede hacer algo por la salud renal, también desde la empresa y desde hoy mismo.

Salud renal en Mutua Madrileña

Salud renal en Acciona

Salud renal en Repsol

Salud renal en Banco de Santander