La Fundación Renal ha estado presente en el congreso del Grupo Español Mulidisciplinar de Acceso Vascular (GEMAV) a través de una nutrida representación de profesionales de nefrología y enfermería nefrológica.

La participación de la Fundación en el Cuarto Congreso GEMAV comenzó el jueves día 6 de octubre con los nefrólogos, Angel Méndez y de nuestro centro de diálisis Los Llanos II de Getafe, y Alfredo Cordón, de Los Llanos I de Móstoles, que impartieron un workshop sobre mapeo y diagnóstico de la patología del acceso vascular, y con la supervisora de los centros de Las Encinas de Ciudad Rodrigo y El Castañar de Béjar, Mª Luz Sánchez, quien hizo lo propio con una charla teórica y otro taller sobre evaluación de la fístula arteriovenosa mediante la exploración física.

En la jornada del viernes la supervisora de nuestros centros de Salamanca participó también con una comunicación oral sobre el efecto de la dirección de la aguja arterial en la medición del flujo de acceso con métodos dilucionales, presentando los resultados de un trabajo llevado a cabo por el Grupo de Investigación de la Fundación Renal, en el que han participado, además de la ponente, las enfermeras Silvia Villoria, Marina Burgos y Alberto Sánchez. Por su parte la Dra. Karina Furaz y la enfermera Mª del Mar Andrés, del centro de diálisis Los Llanos I de Móstoles, participaron en el estudio multicéntrico sobre mortalidad asociada al catéter venoso central, cuyos resultados fueron presentados también el viernes en una comunicación oral por parte del Dr. Enrique Gruss, jefe de servicio de nefrología del Hospital Universitario Fundación Alcorcón. Por último Mª del Mar Andrés ha participado también en la encuesta multicéntrica sobre catéteres tunelizados para hemodiálisis, cuyos resultados ha presentado Sonia Mendoza del Hospital Universitario del Henares.

El sábado los representantes de la Fundación presentaron otras tres comunicaciones orales en que se dieron a conocer los resultados de otros tantos estudios llevados a cabo por el Grupo de Investigación de la Fundación Renal. El primero de ellos ha sido un estudio sobre el tipo de acceso vascular en pacientes prevalentes y la posible influencia del género y la edad en el mismo, el segundo un análisis de posibles causas modificables que permitan alcanzar un objetivo adecuado de catéteres en pacientes prevalentes en hemodiálisis y el tercero ha sido un trabajo en el que se han analizado los posibles motivos que pueden tener los pacientes portadores de catéteres para no aceptar realizarse una fístula arteriovenosa.

En el Cuarto Congreso GEMAV también la directora asistencial, Mª Dolores Arenas, y el director de enfermería, David Hernán, participaron moderando sendas mesas sobre acceso vascular y hemodiálisis domiciliaria la primera y el reto de la formación especializada en enfermería el segundo. Por último Mª Luz Sánchez y David Hernán, han participado en nombre de la enfermería en sendos debates del Diván del GEMAV. En el primero, titulado Discutiendo grandes dilemas, se han abordado temas como accesos vasculares percutáneos, uso de las guías, ecodoppler y la formación y desarrollo de equipos multidisciplinares. En el segundo, bajo el título Dispositivos de último grito, cuántos han venido y cuántos se quedan,  se han aportado los distintos puntos de vista de nefrólogos, enfermeros, cirujanos vasculares y radiólogos sobre la actualización en temas como técnicas de punción, buttonhole, dispositivos VWNG, la innovación en catéteres venosos centrales y manejo del ecodoppler. Por parte de enfermería se ha destacado la importancia de la punción de las endofístulas para que tenga su máximo desarrollo y no acabe siendo una innovación fallida. En esta línea David Hernán ha destacado que además sería una técnica mejor valorada por los pacientes, al dejar en el brazo sólo una mínima cicatriz.

Estudios de la Fundación Renal presentados en las comunicaciones orales

En su intervención sobre el efecto de la dirección de la aguja arterial en la medición del flujo de acceso con métodos dilucionales, Mª Luz Sánchez ha explicado que la medida del flujo del acceso vascular a través de métodos dilucionales exige la punción retrógrada de la aguja arterial y que las últimas recomendaciones de canalización del acceso defienden la punción anterógrada de ambas agujas. La supervisora de los centros de Salamanca ha indicado que este estudio cuantifica el error de medición generado por la punción anterógrada en la medida del flujo de acceso y analiza su repercusión clínica.

El estudio sobre el tipo de acceso vascular en pacientes prevalentes y la posible influencia del género y la edad en el mismo presentado por el Dr. Ángel Méndez, concluye que el inicio en diálisis con catéter venoso central es más frecuente en las mujeres, en especial en pacientes menores de 65 años, la fístula de codo y protésica es más frecuente en mujeres que en hombres, independientemente de la edad, y, por último, que los pacientes mayores de 65 años se dializan con más frecuencia con catéter venoso central como acceso vascular prevalente.

Por su parte en la comunicación sobre el análisis de posibles causas modificables que permitan alcanzar un objetivo adecuado de catéteres en pacientes prevalentes en hemodiálisis, el Dr. Ángel Méndez, a la pregunta de si existen causas modificables que permitan alcanzar un objetivo adecuado de catéteres en pacientes prevalentes en hemodiálisis, ha concluido que si es posible, siempre que se den dos premisas, la primera, evitando que los pacientes lleguen a hemodiálisis con catéter, ya que esto favorece la negativa a la realización de la fístula , es decir planificando adecuadamente el acceso vascular desde ERCA. puesto que un 30% de pacientes portadores de catéteres estaban pendientes de cirugía y de ellos, el 10% eran portadores de fístulas arteriovenosas (FAV) realizadas pero no utilizadas, y, la segunda, que se actúe específicamente en los pacientes que se niegan a realizarse una fístula (36% de los pacientes portadores de catéteres) mediante una pedagogía e información adaptada a la causa que motiva la negativa.

El Dr. Alfredo Cordón, que presentó el resultado del estudio sobre posibles motivos que pueden tener los pacientes portadores de catéteres para no aceptar realizarse una fístula arteriovenosa, ha explicado que el miedo ha sido la causa más frecuente de negativa como resultado de una experiencia negativa en la realización de la fístula.Igualmente el estudio ha revelado que los pacientes que inicia diálisis con catéter venoso central son reacios al cambio de acceso vascular, por lo que cobra especial importancia la realización de la fístula desde las consultas de ERCA ha explicado que el miedo ha resultado ser el principal factor de impacto negativo. Igualmente el estudio ha revelado que los pacientes que inicia diálisis con catéter venoso central son reacios al cambio de acceso vascular, por lo que cobra especial importancia la actuación desde las consultas de ERCA para poder hacer la fístula antes de iniciar el tratamiento.