Un año más la Fundación Renal Iñigo Álvarez de Toledo y la Federación Nacional de Asociaciones ALCER han concedido sus ayudas al estudio para personas con enfermedad renal crónica, en tratamiento sustitutivo o ERCA. En esta séptima edición se han otorgado un total de 11 ayudas a otros tantos alumnos con ERC, en el marco de la convocatoria para el curso 2023-2024, cuyo objetivo es facilitar el acceso a la formación reglada de este colectivo.
En esta ocasión, de las once ayudas concedidas, dos de ellas son de continuidad y las nueve restantes han recaído en nuevos beneficiarios, dado que en las dos últimas ediciones nueve alumnos finalizaron sus estudios. Por tipología de estudios contamos con un máster universitario, ocho alumnos de Formación Profesional, cuatro de ellos de grado superior, tres de grado medio y uno de FP básica. Los otros dos estudiantes están cursando primeo y tercero de ESO, respectivamente. Asimismo de los adjudicatarios, cinco de ellos están trasplantados, cuatro en tratamiento de hemodiálisis, uno en diálisis peritoneal y otro en ERCA.
En las seis ediciones anteriores se otorgaron 63 ayudas a otras tantas personas con enfermedad renal, siendo 15 de ellas continuistas, 9 de los cuales han finalizado sus estudios. Dos estudiantes han finalizado sus estudios de grado, uno ha finalizado medicina en junio y ahora está inmerso en la preparación del MIR, examen al que se presentará en 2024. Otra se ha graduado en biología, ha realizado además un máster de investigación en medicina transaccional y su objetivo inmediato es empezar un doctorado en biomedicina.
En el curso 2021-2022 dos de los beneficiarios de las ayudas han terminado magisterio, uno bachillerato y un cuarto sus estudios de FP de panadería. Ya en el curso 2022-2023 otros tres estudiantes han finalizado sus ciclos formativos, uno un ciclo de Formación Profesional en operaciones de laboratorio, otro ha finalizado una Formación Profesional Básica de servicios administrativos y se ha matriculado en un grado medio de administración de empresas y un tercero ha terminado el grado superior de riesgos laborales y ya se ha incorporado al mercado de trabajo.
La Fundación Renal, que financia este programa, destina un total de 6000 euros anuales. Los importes concedidos se han destinado fundamentalmente a colaborar en los gastos de alojamiento, transporte o material didáctico.
Compaginar los estudios con la enfermedad renal
Zhivomir, beneficiario de las ayudas durante seis años, se graduó en medicina en junio y ahora está preparando el MIR, durante los dos primeros años compaginó la carrera con su tratamiento de diálisis, y trabajando los veranos en nuestra lavandería Agua y Jabón, o Laura que se ha graduado en biología sanitaria justo al finalizar la pandemia, ha realizado un máster de investigación en medicina transaccional y su objetivo inmediato es empezar un doctorado en biomedicina, ambos son un ejemplo de lucha y superación y en sendas entrevistas nos cuentan cómo ha sido su experiencia de compaginar los estudios con su enfermedad y su tratamiento y lanzan un mensaje inequívoco a otras personas en su misma situación: se puede