Unos sencillos análisis de sangre y orina permiten el diagnóstico precoz de los problemas renales. Esta medida, junto con unas pocas reglas para reducir los factores de riesgo, marca la diferencia en prevención.
Los riñones son pequeños soldados silenciosos que trabajan sin quejarse hasta que ya es demasiado tarde: se rinden cuando han perdido entre el 70 y el 80% de su función y aparece una enfermedad renal crónica, un problema con un enorme impacto clínico, social y económico.
De ello se habló durante un encuentro de Il Tempo della Salute con Vincenzo Di Leo, médico responsable de la Unidad de Nefrología, Diálisis y Trasplantes del Hospital Universitario Policlínico de Bari, y Vincenzo Vanacore, presidente de la Aned (Asociación Nacional de Hemodiálisis). Se estima que en España que 1 de cada 7 adultos presenta enfermedad renal crónica (ERC) y un 40% de ellos no lo sabe, según la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG).
