Desde que la Junta de Andalucía aprobara la eliminación de taxi rural sanitario, el mismo que permitía a los enfermos renales desplazarse desde sus domicilios en zonas rurales hasta el centro correspondiente para el tratamiento de hemodiálisis, el malestar entre quienes sufren de este tipo de enfermedades no ha dejado de crecer. Este miércoles, la Diputación de Sevilla, la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA España), alcaldes de municipios afectados y una representación de taxistas se ha reunido para denunciar que la Junta eliminara la función del taxi rural sanitario a principios de 2025. «Es un paso más en el deterioro de la calidad sanitaria de nuestra provincia y en el desmantelamiento del mundo rural«, ha defendido Javier Fernández, presidente de la Diputación de Sevilla.