El fósforo forma parte de los tejidos duros como huesos y dientes, es importante en el mantenimiento del pH y para todas las funciones celulares que requieren energía. En los enfermos renales su acúmulo puede producir hiperparatiroidismo entre otros problemas, por ello es importante controlar su consumo.
Los pacientes en hemodiálisis requieren de un mayor aporte proteico, con la dificultad de que precisamente los alimentos con mayor contenido en proteínas coinciden con aquellos con niveles más elevados de fósforo. Por ello, debemos tener especial cuidado al elegir carnes, pescados, legumbres y cereales. Se recomienda optar por aquellos alimentos con menor cantidad de fósforo, que en relación aporten una mayor cantidad de proteína (es decir, que tengan un ratio fósforo / proteína menor a 16 mg/gr). Estos son, por ejemplo: el pollo, pavo o conejo, en el caso de las carnes; o el bacalao, la dorada, el mero, la sepia, el pulpo o el atún.
Funciones: el fósforo forma parte de los tejidos duros como huesos y dientes, de las membranas celulares, es importante en el mantenimiento del pH y almacena energía química en forma de enlaces de ATP, siendo necesario en todas las funciones celulares que requieren energía.
Efectos por acumulación: puede producir hiperparatirodismo secundario, provocando descalcificación ósea y posterior precipitación de fosfato cálcico en tejidos blandos (entre ellos el riñón, empeorando su función).
Distribución en los alimentos: está presente en la mayoría de los alimentos que componen nuestra dieta (alimentos proteicos, lácteos, legumbres y cereales), por ello es muy importante respetar las indicaciones y raciones pautadas por nuestro médico y nutricionista. Es importante señalar que está presente en conservantes alimentarios.
Absorción del fosforo según su fuente:
- Alimentos proteicos de origen animal: elevado porcentaje de absorción
- Alimentos de origen vegetal: su porcentaje de absorción es menor que el fósforo presente en los alimentos animales, debido a la presencia de fitatos, que disminuyen su absorción favoreciendo que se eliminen directamente por las heces
- Aditivos alimentarios: al fósforo presente en estos compuestos, de origen inorgánico, se absorbe en su totalidad (100%), a diferencia de el fósforo presente en alimentos, que se absorbe parcialmente
Medidas generales: con carácter general para controlar el consumo de fósforo se debe evitar el consumo de lácteos, frutos secos, yema de huevo, y aquellos productos elaborados con leche como batidos, flanes, natillas, yogures, quesos curados, etc. También se deben evitar productos como cereales integrales, pan integral, biscotes integrales, galletas integrales, etc.
Sugerencias para disminuir el aporte de fósforo en la dieta:
- Como alternativa a la leche de vaca tenemos podemos optar por alguna bebida vegetal, como la bebida de arroz o la de soja (evitar las que provengan de frutos secos, por su alto contenido en potasio)
- En caso de consumir leche de vaca, optar por semidesnatada frente a entera y desnatada.
- La clara de huevo es rica en proteínas y pobre en fósforo por lo que es una gran alternativa al huevo entero para los revueltos, tortillas, pasteles…..
- Intentar consumir carnes blancas frente a carne de cordero vacuno y cerdo.
- Elegir pescados con menor contenido en fósforo (podemos comprobar su contenido en la app Nefrodiet): dorada, atun, boquerón, bacalao, salmón, trucha, palometa, pulpo…