La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha aprobado una resolución histórica que marca un antes y un después en la lucha contra la Enfermedad Renal Crónica (ERC). Durante su 78ª Asamblea Mundial de la Salud, celebrada la semana pasada en Ginebra (Suiza), el organismo internacional decidió incluir la salud renal como prioridad en su agenda global para los próximos años. Es la primera vez que la OMS reconoce oficialmente a la ERC como un problema creciente de salud pública, con un impacto sanitario, económico y social significativo en todo el mundo.
La decisión ha sido muy bien recibida por la comunidad sanitaria en España, especialmente por la Sociedad Española de Nefrología (S.E.N.), la Organización Nacional de Trasplantes (ONT), la Sociedad Española de Enfermería Nefrológica (SEDEN) y la Federación Nacional ALCER, que agrupa a los pacientes renales. La resolución fue promovida por Guatemala y contó con el respaldo de numerosos Estados Miembros, entre ellos España.